Cuando llegué a Atlapa para cubrir la cuarta Gala Típica, la verdad pensé que sería un fracaso, pero a medida que fue pasando la noche, la sala se fue llenando y tengo que decirles que quedó muy buena.
Y eso que tres de los más ranqueados, Osvaldo, Ulpiano y Alfredo, no estuvieron. Al parecer tenían sus propias galas, como el caso de Alfredo, que esa anoche celebró su cumpleaños en el Jardín La Unión de La Chorrera. Pero, bueno, les cuento que este año el tiempo estuvo mejor medido. El "Doro" arrancó a eso de las 9: 00 p.m. porque tenía toque después. Quiero decirles que "El Poste" me sorprendió cantando sus temas del pasado y con eso rompió el hielo. En el orden siguieron Manuel de Jesús y Abdiel Núñez. Bien hecho, sacaron su repertorio más "pesa'o", pero a esa hora no había llegado tanta gente. Imagínense que tuvieron que salir corriendo para Lídice de Capira, donde tenían toque y los llamaron varias veces porque había una multitud esperándolos. Chuzo, la vida de artista es dura.
Llegó entonces Raulito Aparicio, uno de los acordeonistas que pisaba por primera vez la Gala. El "pela'o" tiró teclas y recibió sus aplausos, pero la que se robó más de un aplauso fue la guapa Dayra Moreno, quien se presentó con su primo, Salomón Moreno, en una cantadera con "to'" y controversia. Como era de esperarse, la diva de la décima la botó.
Llegó después Isaac de León, el otro nuevo retoño que este año visitó la Gala y también llevó a muchos a tirar un par de paso. La cosa fue cogiendo cuerpo y a eso de la 1:30 a.m. la maquinaria Plumas Negras alborotó al público para que llegara Sandra, a eso de la tres de la madrugada. ¡Ahhh! se me olvidada decirles que la diva del típico tuvo una noche tan ajetreada que se presentó a la Gala con el mismo vestido que usó en el Figali. Según nos confesó, no tuvo tiempo. Waaa...
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