Resulta que hace un año, mi esposa recibe muchos e-mails de sus amigos de Argentina, en especial de uno que dice ser compañero de la escuela secundaria. Le manda hasta cinco e-mails por día, eso me preocupa porque son muchos y lo veo extraño. Con decirte que ahora mi esposa me dijo que quiere ir, nuevamente, a Argentina donde sus padres, cosa que me tiene pensando, pues hace solamente dos meses fue allá por 15 días.

Te cuento que desde que ella llegó de ese viaje, ha cambiado de actitud conmigo. Le he preguntado qué sucede y me dice que estoy viendo cosas que no existen.

Yo no soy un chiquillo y me doy cuenta, es más, le pedí que deje de escribirle a ese muchacho, pero dice que no lo hará porque es su amigo.

No la quiero cuestionar mucho, porque siempre terminamos peleando. ¿Qué puedo hacer para que esto no sea un problema mayor? Señor preocupado.

DILE QUE HABLE CON LA VERDAD
Hola, lamento decirte que a mí tampoco me parece correcta la actitud de tu pareja; por eso creo que lo que tienes que hacer es hablar cuanto antes con ella, para que te explique qué es lo que sucede.

Me parece que lo puedes hacer de buenas maneras, pidiéndole que sea sincera contigo y te explique si tiene algo con ese hombre o no. Si en verdad es su amigo, pregúntale por qué últimamente está alterada y cambia de actitud cuando hablan de él.

Explícale que no es tu afán dudar de ella, sino que las cosas son raras y mucho más ahora que quiere viajar a cada rato a su país de origen. Si no te hace caso e insiste en conversar con ese hombre y viajar, tendrás que tomar medidas, por lo menos ver qué hay en esos e-mails.

Ojo, ese es el último paso, pues en una relación si no hay confianza y comunicación, no hay nada. ¡Suerte!