El conjunto heleno, que no había ganado antes de acudir a Portugal ningún partido en dos participaciones en torneos mayores (Eurocopa-80 y Mundial-94), se convirtió además en el tercer equipo que logra ganar una final a una selección local en un torneo mayor, tras Uruguay en el Mundial de Brasil-50 y la de la escuadra auriverde en 1958 a Suecia (5-2).

Además, Grecia fue la bestia negra de Portugal en el torneo, a la que ya había derrotado en la primera fase, en el partido inaugural (2-1) y dejó a todo un pueblo sin una celebración con la que había empezado a soñar.

Fiel a su estilo de juego, a la italiana, con una defensa y un centro del campo organizado y muy disciplinado, mérito del técnico alemán Otto Rehhagel, Grecia maniató a todas las estrellas lusas durante los 90 minutos, sin que gozaran de grandes ocasiones, hasta que marcaron su tanto en el segundo tiempo.

Grecia fue un justo campeón y hoy todo un pueblo celebra.

Ahora los flamantes campeones de Europa se preparan para las Olimpiadas, que tendrán como sede la ciudad de Atenas.

¡ENHORABUENA, GRECIA!
0tto Rehhage. Artífice del triunfo griego. Los cambios que hizo salieron a la perfección.

Luiz Felipe Scolari. No pudo ganar la Euro. Quedó en deuda con la afición.

Cristiano Ronaldo. Tuvo varias oportunidades, pero las desperdició. Sus lágrimas al concluir el partido fueron conmovedoras.

Angelo Charisteas. Un verdugo por los aires. Su gol de ayer puso a todo el pueblo griego a celebrar.

Figo. Puso empeño en la cancha, pero eso no bastó para que su equipo ganara.

Markus Merk . El colegiado estuvo bien. No tuvo ningún tipo de contratiempo en el encuentro final.