HOLA MOZA:
Esta es la segunda ocasión en la que te escribo, pero ahora el problema no es mío.
Tengo una hermana que es buena gente, divertida, pero tiene un problema: no le gusta trabajar.
Todo el tiempo se la pasa quejándose de su mala suerte, que porque todo le sale mal, maldice a quien no le presta dinero... en fin, ya tiene a todos cansados.
Mi papá la quiere mucho y creo que le tiene lástima, porque mi mamá murió cuando era una niña (ella es la más pequeña) y por eso le corre los gustos.
Hace dos años mi padre le pagó los estudios técnicos y se endeudó. Ella terminó los cursos, pero nada de trabajo, dizque que no la llaman.
¿Sabes a qué hora ella sale a comprar el periódico? A las 11 de la mañana. Así, ¿quién consigue algo?
Mis otras hermanas, estamos dispuestas a hablar con papá, porque eso no puede seguir así, o le pone un alto, o somos nosotras la que vamos a confrontarla. Hermana molesta
QUERIDA AMIGA
Creo que tienes razón, pero tienes que tomar las cosas con calma.
Te siento extremadamente molesta y así no se pueden hacer las cosas.
Creo que deben hacer una confrontación, y sentar a tu hermana en el banquillo de los acusados, eso sí, sin herir y buscando el equilibrio.
Es bueno que le abran los ojos a tu papá y a tu hermana, porque la vida no es como ella cree. Hay que esforzarse para conseguir lo que se quiere. La suerte una se la crea con sacrificios, dedicación y esfuerzo, y uno de ellos es levantarse temprano.
Hasta que ella no cambie su forma de ser, no dejará de ser una niña y ella, según me cuentas, ya está llegando a los 30.
Siento que la quieres y que te duele verla así y por eso haces lo que haces, en la vida el amor es también corrección y ella tiene que saber que tu padre no le va a durar toda la vida y que se tiene que hacer mujer y no darle tantos dolores de cabeza.
Recuerda que todo esto lo debes hacer con cabeza fría, para que tu mensaje sea el correcto. |