"Aló, mamá, no voy pa' la escuela porque 'toy to'a mojá". Esa fue la expresión de una de las estudiantes del Instituto Fernando de Lesseps de Arraiján, luego de que la fuerte ráfaga de viento de ayer la dejara empapada y con el uniforme manchado de lodo negro, a pesar de que se encontraba en una de las paradas de Arraiján e iba camino al plantel.
Así como ella, fueron sorprendidos otros estudiantes que no comprendían por qué pasado el mediodía se oscurecía el cielo y el viento estuviera como loco haciendo de las suyas.
Al recorrer los sectores de este distrito, pasado unos quince minutos de esta sorpresa, había caras de preocupación de algunos moradores de Arraiján, pues sus techos volaron y sus enseres quedaron todos mojados. Otros quedaron asustados con la caída de árboles sobre sus viviendas o atravesados en las vías.
El Sistema Nacional de Protección Civil preliminarmente reportó en las provincias de Panamá y Colón 49 viviendas y al menos a unas 214 personas afectadas por desprendimientos de techo y caída de árboles sobre sus residencias. Por su parte, Roberto Velásquez Abood, director del SINAPROC, dijo que el mal tiempo se debió al paso de una onda tropical que se desplazó desde el Este de la provincia del Darién y Kuna Yala, y estuvo acompañada de lluvias y actividad eléctrica frecuente. Los fuertes vientos alcanzaron intensidades de 22 nudos en el observatorio del Aeropuerto de Tocumen.
CIFRAS
En el Oeste hubo 17 viviendas con 54 personas afectadas y en Colón, 32 casas y 160 personas afectadas.
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