Evite permanecer en la misma postura por largo tiempo. Muévase constantemente, esto estimulará su circulación y evitará que los músculos se contraigan.

AGÁCHESE CON CUIDADO. Cuando tenga que hacerlo trate de mantener el torso recto, evite doblarlo para proteger la parte baja de la espalda. No cargue objetos pesados cuando esté agachada; si lo hace, estará poniendo su columna a trabajar muy duro.

SIÉNTESE BIEN. Evite estar todo el día sentado en sillas incómodas. Use un cojín si es necesario.