DiBlasio compartió con el público panameño casi dos horas de presentación, para la cual invitó músicos de México, Argentina, Estados Unidos. Los bailarines los trajo de Venezuela.

"Chicas no se vayan, que tenemos que vender este trío, y me alegro que hayan tomando la decisión de unir sus voces. Panamá no es sólo tierra de saltadores y de jugadores", dijo en forma de chiste.

El repertorio del "Piano de América" incluyó muchos géneros, y no faltó el tango. "Mi padre me decía cuando tenía 12 años: "Raulito tocá un tanguito", y me lo silvaba desde donde estaba acostado. Y yo lo tocaba en un pianito".

"Aquí hay alguien que le ha compuesto canciones a todo el mundo, menos a mí", saben de quién hablo". En ese momento dejó el piano y buscó a Omar Alfanno, le dio un beso y le preguntó si quería que tocara algo especial para él.

Las canciones que causaron emotividad fueron las que grabó en su último disco, Primavera, a dúo con Marco Antonio Solís: Dónde estará mi primavera y Si no te hubieras ido.

Toque panameño

"Raulito", quien fue contratado por la Fundación San Felipe para este concierto, sacó con sus teclas una parte de la canción: El tambor de la alegría.