Siguen desafiando la velocidad y exponiendo su vida al peligro y también la de terceros.
De acuerdo con José Ríos, director de Operaciones del Tránsito de la Policía Nacional, todavía la Calle 50, la autopista de La Chorrera y ahora el sector de Guadalupe de ese distrito, continúan como los sitios preferidos por los jóvenes para realizar las denominadas regatas. Dijo que para enfrentar esta situación se colocan los vehículos en esas áreas, pero reconoce que, al momento en que el patrulla se desplaza a otro sitio, los jóvenes entre 18 y 25 años se aprovechan para cometer esta infracción.
Precisó que el Decreto 640 del Reglamento de Tránsito en su Artículo 255 establece que, al que sea sorprendido por primera vez en regatas, la sanción de B/. 2,500.00, suspensión de la licencia por 6 meses y asistencia a seminarios o charlas según el tipo de intoxicación, que se le detecte.
Si es reincidente, entonces se le aplica una multa de B/3,500.00, suspensión de la licencia por un año y se le solicita acudir a seminarios. En tanto, si es sorprendido en una tercera ocasión, se le sanciona con B/5,000.00 y se le cancela definitivamente la licencia.
Ríos explicó, que en el caso de que el infractor sea un menor de edad, se impondrá la multa por filiación a su padre, madre o tutor en el momento.
Agregó que en el caso de que el vehículo que fue utilizado para participar en competencias de velocidad o aceleración (regatas) sea modificado, no podrá circular hasta que le sean retiradas las adecuaciones, una vez se le establezca la sanción.
|