Les va a salir un tigre. A pesar de ser un lugar destinado para la diversión de los niños y niñas, donde no corran peligro, el parque de la comunidad de San Fernando, en Juan Díaz, está tan descuidado que puede ser una trampa de muerte y los padres no los dejan visitarlo.
La señora Lorena González está preocupada, pues hace tiempo nadie le da mantenimiento al parque, ubicado en la intersección de las calles 2ª y 6ª.
Explicó que por si fuera poco, al menos dos luminarias están dañadas, una que no enciende y la otra prende y se apaga.
Aseguran que han reportado los postes a la compañía eléctrica, pero no han recibido respuesta; esto ha provocado que sujetos del mal vivir le roben a las personas que regresan de sus trabajos.
Hay que poner de su parte...
Hay basura tirada por doquier, según dijo otro morador que evitó dar su nombre, y son las mismas personas del área quienes lo han dañado, porque los jóvenes son los que dejan los desechos por ahí. Además, maltratan los juegos, tirándolos unos contra otros.
A causa del herbazal han proliferado los mosquitos, por lo que temen que se den casos de dengue, y ahora más con las constantes lluvias.
POCO TIEMPO
El parque tiene al menos seis años de haber sido construido.
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