Puede iniciar limpiando el horno. Si tuvo la precaución de limpiarlo luego de usarlo, posiblemente un paño humedecido en bicarbonato sea suficiente.
En cambio, si tiene grasa incrustada, hay que encender el horno hasta que tome un poco de temperatura, apagar y aplicar antigrasa o lavavajillas. Deje actuar y aclare con abundante agua.

Antes de limpiar el extractor, recuerde desenchufar o desconectar el interruptor de contacto. Cada vez que cocine, pase un paño humedecido con desengrasante por la campana del extractor para que no se acumule la grasa. Una vez a la semana, es conveniente limpiarlo a fondo.
Retirar las rejillas que actúan de filtro es muy fácil, rocíe con un antigrasa y deje actuar. Mientras tanto, limpie el interior de la campana con una esponja humedecida con amoniaco; cuidado con mojar el motor.
Remueva la grasa de las rejillas con un cepillo pequeño, aclare con agua bien caliente y deje secar bien; luego, coloque en su lugar.

Limpieza de los armarios: En los armarios, siempre se acumulan restos de alimentos, especialmente los que son en polvo o molidos, como el azúcar, sal, café, etc. Una vez al mes, es conveniente retirar estos restos para prevenir la aparición de insectos. Vacíe los armarios y repose con un trapo humedecido con lavavajillas, aclare y seque. Antes de guardar las cosas en los armarios, deje secar bien su interior.