Agradeció a su santo. Como todos los años, ayer, la pequeña Yuleisy De Los Ríos despertó temprano para asistir a la misa y a la procesión del Divino Niño, en la iglesia Catedral. Y es que a pesar de tener tan sólo seis años, es devota del santo, pues según su abuela, la ha ayudado desde que nació.
Sin embargo, Yuleisy no era la única agradecida. Dentro de la Catedral, personas, en su mayoría con atuendos rosados que simulaban el vestido del Divino Niño, le daban gracias por sus milagros, algunos entonando alabanzas.
Aunque no precisó la cantidad de personas que asisten, el sacristán de la iglesia Catedral, Santiago Rodríguez, dijo que la mayoría van a realizar mandas por problemas de índole personales, familiares o de salud, y regularmente son de barrios como Santa Ana y El Chorrillo.
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