Según los residentes de La Pintada, hace muchos años han denunciado el mal estado del vertedero y el peligro que representa, pues es un basurero no controlado.

Esta carretera que está obstruida por la basura, por vidrios y hasta ramas, conduce a los sectores de Orarí y Potrerillos, donde habita gran cantidad de campesinos que tienen que pasar a diario por el lugar.

Pedro Rodríguez, quien reside en Orarí, hace mucho tiempo sufrió un accidente y ahora camina poco a poco, pero asegura que teme pasar por esta vía porque hay vidrios y jeringuillas regadas en el suelo.