"Ya los doctores lo habían desahuciado, se trataba de una enfermedad que ni los médicos podían hacer nada, pero el Divino Niño me lo salvó".
Estas fueron palabras llenas de fe y de agradecimiento de Dina, madre del niño Rodney Moreno, que con la gracia de Dios hoy tiene cinco años de vida saludable, luego del ofrecimiento de su madre al Divino Niño.
PROCESION
Cientos de devotos del Divino Niño caminaron en la procesión el pasado 25 de septiembre, por las principales calles de Penonomé en horas de la tarde. La mayoría de los que allí caminaban eran padres con sus hijos, agradeciendo por un favor recibido, como el caso de la señora Dina, que aseguró que vivirá toda su vida agradecida.
Los chocolates, dulces y niños con hábitos rosados eran lo característico de esta procesión, en donde los cánticos y el sonido de una banda, alegraban el recorrido con el Divino Niño por todo Penonomé.
Dina Quirós, contó muy emocionada: "Mi madrina Sita de Puga me recomendó rezar la novena al Divino Niño cuando lo llevé al hospital Santa Fe y me dijeron que me tenía que resignar. Mi hijo empezó a curarse por milagro de Dios".
"Les doy imágenes del Divino Niño, estampitas, confetis y lo que pueda, porque es necesario que los niños y adultos crean en el Divino Niño y que lo vayan regando por el mundo, para agradecerle por el favor que me hizo de salvar a mi hijo", agregó.
Mike Moreno es el hermano mayor del pequeño; él, al igual que su madre, caminó la procesión con una canastita de pequeños Divinos Niños que regalarían pasada la procesión, como muestra de agradecimiento por el favor recibido.
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