¡Putum, pam, push...! Al ritmo de la batería y de la guitarra eléctrica, empezó el concierto que encendió la noche: ‘Os Almirantes, en el Hotel Veneto.
Una buena parte de los que estaban en las tragamonedas y mesas de apuestas, detuvieron su juego para dejar que la adrenalina comenzara a recorrer su cuerpo al ritmo de temas como "Woyo, yuo, yuo, te voy a dar...". ¡Hasta abajo!
Eso fue tremendo, y qué les cuento de la energía de los hermanos Regueira, "Chispín" y "Spencer", era impresionante. Para los que no han ido al Veneto, la tarima es alta, es casi un balcón, y ver con el ímpetu con que saltaba Víctor, era algo así como los saltos de Saladino y no es burla, es para que tengan una idea; a veces daba la impresión que se podía venir abajo. ¡Jooo!
Bueno, sigo con más. "Cuando estábamos en el party", la cosa estaba que ardía; algunos miembros del público brincaban en sus propios talones, por no parecer demasiado extasiados, pero los pillé. ¡Ja. ja, ja!
La energía de ‘Os Almirantes no era para menos y es que hacía varios meses que no tenían una presentación para sus fanáticos, de modo que desbordaron toda la energía guardada. ¡Ufff!
"Jumping buay", "Al filo de tu piel", y "Va a caer la noche", fueron otros de los temas que estos cantantes del patio interpretaron durante su presentación, entre la noche del jueves y las primeras horas del viernes. ¡Aaaah!
|