Recordaron lo ocurrido el pasado 23 de octubre de 2006. Más de 50 pasajeros que viajaban en el bus de la ruta Mano de Piedra, con matrícula 8B-3672, vivieron ayer momentos de pánico cuando la unidad del transporte se llenó de humo. A siete minutos de haber entrado al Corredor Norte, por el tramo 10, el bus conducido por Orlando Wever empezó a tener desperfectos mecánicos, pero por fortuna del humo no pasaron a las llamas.
Ante esta situación, el "pavo" empezó a cobrar el dólar del pasaje para no perder todo el viaje.
VIVENCIA
Mirna de Serrano, quien viajaba en el bus, contó que al principio sintieron un olor a caucho quemado, lo que provocó que los pasajeros empezaran a gritar y a pedirle al conductor que parara. "En segundos, el bus quedó lleno de humo y las personas salían por las ventanas. La situación me aterrorizó y no podía salir", contó.
Finalmente, el bus se detuvo y las personas terminaron de bajar. El "pavo" buscó agua para echarle al motor, con lo que logró apagar el conato de incendio.
Uno de los pasajeros se lanzó por la ventana y se quebró el brazo. Además, una joven entró en pánico, se desmayó y otras fueron afectadas por los nervios.
Después de 15 minutos del hecho llegaron los bomberos que brindaron atención médica a los pasajeros y los más graves fueron trasladados a centros médicos.
SANCION
Se conoció que la ATTT le canceló el certificado de operación e inhabilitó la placa. Se ordenó una investigación.
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