"Desde la mañana nos dimos cuenta que la pared se estaba rajando, pero no nos hicieron caso", dijo evidentemente preocupado uno de los trabajadores del proyecto contiguo al edificio.

Y es que fueron dos las personas heridas: Jonathan Pilar Rivera, de 19 años, y Mariano Torres Caballero, de 25. Ellos se encontraban recostados a la pared, que en cuestión de segundos se vino abajo.

ALERTA
Fueron momentos de desesperación, rápidamente trasladaron a los heridos al Hospital Santo Tomás, mientras que los trabajadores alarmados buscaban entre los escombros, pues pensaban que alguien había quedado atrapado. Así fue como fueron llegando unidades del Cuerpo de Bomberos y de SINAPROC. Se utilizó una retroexcavadora y hasta perros entrenados para buscar entre los escombros. Por suerte, no había nadie más.

Pero fue un accidente que pudo evitarse, pues como afirma Rolando Gutiérrez, jefe de la obra, "varias personas habíamos dicho que esa pared iba a caerse, ya se les había llamado la atención sobre eso, pero ellos siguieron haciendo las excavaciones hasta que llegó el mediodía y se desplomó la pared".

RESIDENTES
El inmueble afectado fue el número 756, allí residen unas 17 familias, algunas de éstas fueron trasladadas a la Pensión Santa Ana, otras a casa de familiares y unas cuantas se negaron a desalojar el lugar.

El lugar ha sido condenado, mientras que las autoridades iniciaron las investigaciones para deslindar responsabilidades.

ESTABLES
Se conoció que los heridos están fuera de peligro y se recuperan de los golpes.