Sabes, tengo treinta y cinco años, soy el ser más inseguro, porque a pesar de ser una profesional de la modistería, no soy capaz de salir a buscar trabajo, siento que no tengo personalidad y que parezco como un extraterrestre, y no es que sea muy fea, sino que me siento rara porque no sé maquillarme ni vestirme.

Encima de todo, mi esposo hace que me sienta peor, siempre me dice que soy una inútil y que no soy capaz de ayudarlo en la economía del hogar, que parezco una vieja que ni siquiera me puedo arreglar y que cualquier día se va a buscar a otra que sí valga la pena.

Moza, yo todo se lo he dado a él, no es justo que me haga eso ahora que ya no tengo ninguna oportunidad; por favor Moza, aconséjame. Dorita.

NO PERMITAS QUE TE HUMILLE
Antes que nada, la edad no tiene nada que ver con el descuido personal. Dorita, creo que tienes un gran problema de baja autoestima, y lo primero que te aconsejo es que visites a un psicólogo para que te haga una evaluación y te dé indicaciones para que mejores tu apreciación.

Pero, además, si tu marido te dice que te dejará, déjalo que haga lo que quiera, que si él se va es porque realmente no le interesas.

Ya es hora de que le pongas un alto y decirle que te deje de humillar, porque tú vales como persona.

Busca ayuda de todas las personas que puedas, sal de tu casa, córtate el pelo, cámbiale el color y sácate las cejas para que inicies con ese cambio ya.

Y en cuanto al trabajo, ahorra y cómprate una máquina de coser de esas que no son muy caras, y empieza a coserle a tus vecinas, verás qué rápido lograrás tener dinero para todas tus cosas y no vas a necesitar de ese marido que sólo te ha humillado.

Nadie hace importante a nadie, sólo tú puedes lograr ser lo que quieras. Adelante, sin ningún temor, el futuro es tuyo y te lo mereces. ¡Suerte!