Lewis Hamilton, el primer piloto negro en la historia de la Fórmula Uno, estableció varias marcas para un novato y estuvo a punto de convertirse en el campeón más joven de la serie. El británico encabezó la clasificación casi toda la temporada, pero se vino abajo en Brasil. La intriga y las luchas internas dominaron el debut de Alonso, con McLaren, quien llegó a la escudería británica rodeado de bombos y platillos.