A pesar de los esfuerzos de las autoridades y el trabajo que a diario se realiza para mantener el vertedero, hay mucha basura, lo que ocasiona problemas a la salud, así como al turismo.

Roger Ríos, alcalde de Antón, destacó que mantienen maquinarias en el vertedero para enterrar los desechos, pero muchas veces se registran incendios y este humo afecta a los lugareños que, incluso, padecen de enfermedades respiratorias.

Manifestó que anhelan que en menos de un mes se concluya el proyecto de relleno sanitario provincial, que evitará que existan varios vertederos a cielo abierto.

Hace una semana el gobernador Darío Fernández se reunió con los alcaldes de La Pintada, Penonomé y Antón, quienes tienen serios problemas con los lugares donde se vierten los desperdicios.

Allí se presentó la propuesta de construir el relleno sanitario en el área de Municipio Siglo XXI, en el norte de Penonomé, en donde se lleva a cabo un proyecto de reforestación.