Siguen igual. José Frías, uno de los jóvenes que sufrió quemaduras en el Centro de Cumplimiento de Menores el pasado domingo, está empeorando y son pocas las esperanzas que le dan de vida, afirmó su tío Julio Ríos.
Al enterarse los familiares de su situación, salieron del Hospital Santo Tomás gritando, tirándose en el suelo, pidiendo justicia y acusando a las autoridades de la muerte de su familiar.
En cuanto a su estado de salud, los médicos informaron que los seis jóvenes están graves, pero dos de ellos, incluyendo José, presentan fallos en los órganos, lo que disminuye su probabilidad de vida. El otro que se encuentra en estado delicado es Benjamín Mojica, quien, según sus familiares, rechaza los tratamientos.
|
