Tratan de seguir adelante, a pesar de los obstáculos que han encontrado a lo largo de sus vidas. La familia Carvajal vive en una pequeña residencia ubicada en calle principal de Torrijos- Carter, donde tres miembros padecen de diferentes enfermedades que los imposibilitan para trabajar y hacer sus actividades normales.
Doña Yolanda Carvajal, quien se supone era el sostén de la familia, padece de artritis, sus manos están deformes, los dolores son constantes, la hinchazón en las piernas no le permite caminar y se la pasa acostada en su pequeña cama.
Esta mujer está pasando momentos difíciles, pues su madre, la señora Dorotea Rodríguez, quien tiene unos 85 años, también permanece en cama porque tiene un cáncer en el útero. Yolanda no cuenta con los recursos económicos para mantener su hogar y ayudar hasta lo último a su madre que está desahuciada. Tiene que estar comprándole "pampers", pero a veces no hay dinero.
La angustia invade a esta señora, que sufre por no poder hacer nada ante la situación que vive.
"Me pongo a llorar y me deprimo demasiado, mi hijo pequeño va para la escuela y no tengo cómo comprarle los útiles escolares", dijo.
Sus hijos están con ella en casa, uno sin trabajo y el otro, Rolando Carvajal, tiene tuberculosis y dejó de trabajar producto de la enfermedad.
Duró dos años pensionado, pero ahora le quitaron ese dinero que era parte de la ayuda, con lo que la familia se mantenía y sólo está a la espera de lo que diga la Caja de Seguro Social, porque no puede volver a trabajar.
Las cosas se aprietan cada vez más para esta humilde familia que necesita de la ayuda de las autoridades.
Gilma Aguirre es la nuera de la señora Yolanda, quien ha tomado la responsabilidad de ayudar a ambas mujeres, cuidándolas y aseándolas; además de mantener la casa limpia.
Su apoyo es incondicional, sabe que esas mujeres la necesitan y dice que estará allí pendiente de ellas.
Todos estos problemas agobian a Yolanda y la deprimen, porque siente que no puede hacer nada postrada en una cama. Se atiende en el médico, pero su enfermedad la está consumiendo tras el dolor agudo, y más cuando ve a su madre también sufriendo.
Piden a las autoridades una ayuda para seguir manteniendo su hogar y poder comprar sus medicamentos.
|