Ahora que el cantante mexicano Kalimba está libre, después de que una chica menor de edad lo acusara de violación, han salido varios cuentos.
Un custodio de la cárcel El Cerezo de Chetumal, donde permaneció por varios días el cantante, aseguró que el artista se encontraba sumamente preocupado por su integridad, al considerar que pudo ser blanco fácil de agresiones por parte de otros reclusos.
De acuerdo a una publicación y al testimonio del custodio, el intérprete estaba resguardado día y noche por tres policías, quienes tenían la misión de velar por su integridad, a la vez que se procuró que no tuviera contacto con otros reclusos, al querer evitar a toda costa algún altercado por el delito que se le acusaba: "En este sitio, la seguridad es alta, no se aplica la 'ley de la cárcel', que estipula que a los acusados por violación se les paga con la misma moneda, situación que en el penal de Chetumal no es la excepción", relató el custodio, quien puntualizó que la celda de Kalimba se encontraba localizada en la zona llamada como "La Cocina", un área de detención contigua a la oficina del director del penal.
Además de hablar de lo anterior, la publicación comentó que Kalimba tenía acceso a un televisor, un iPod y a su guitarra. ¡Qué vida!
|