Su madre, la señora Carmen, explicó que son como una especie de vejigas que se llenan de agua. A los días revientan y se hace una herida abierta que en algunas ocasiones le ha causado infecciones.

En un principio, ella pensó que era varicela, pero han pasado 13 meses y la niña sigue igual. Cuando a la pequeña le salieron las primeras ronchas su madre asistió doctor y le mandaron unas cremas para que las manchas se desaparecieran, pero ha sido todo lo contrario, pues cada vez le salen más.

Carmen volvió a llevarla a los galenos hace un par de meses, y le dijeron que debía que esperar a que la niña tuviera cinco años para hacerle una biopsia y determinar qué era, porque posiblemente era una dermatitis.

La señora está preocupada, ya que cada día que pasa la situación empeora y la niña sigue sufriendo.