Acompañada de su esposo Marc Anthony, López llegó luciendo una bata que ella misma diseñó y con su arribo causó revuelo entre los trabajadores del lugar.

"Los empleados estaban muy eufóricos y gritaban J.Lo está aquí", dijo una paciente.

La actriz y cantante se anticipó, ya que con dos semanas de anterioridad reservó una habitación privada para que la decoraran a su gusto; colocaron paneles aislantes, flores de madera y dos pantallas gigantes de plasma.

Un dato interesante es que el hospital se encuentra en "código rosa" de alerta máxima ante un posible secuestro de los bebés, que de ser niño y niña se llamarán Maz y Emme.

Marc Anthony y Jennifer López han manejado con discreción el embarazo de la cantante.

Por otra parte, la revista People le ha ofrecido a la pareja entre cuatro y seis millones de dólares por las primeras imágenes de los gemelos.