Empezó su carrera en el rentado nacional con el desaparecido Lobos de Chiriquí F.C., luego pasó a Tauro y ahora integra las filas del Atlético Chiriquí.

El veterano delantero se considera un amante del fútbol, la única disciplina deportiva que practica y a la que guarda devoción. A sus 33 años, juega con la inteligencia que le dan los años y marca goles a granel. El último se lo hizo a Plaza Amador.

INICIOS
Catalino recuerda los inicios de su carrera con el Cruz Azul en su ciudad natal y su llegada a la selección de Panamá, tras un gran año en 1996. Su carrera se vio interrumpida hace un par de temporadas, sin embargo, el querer jugar lo trajo de vuelta a la actividad.

"Volví en el Clausura pasado, gracias al profesor Daniel Valencia, quien me trajo al equipo... tenía muchos problemas de conducta, pero ahora estoy ayudando al equipo", comentó.

"El fútbol para mí es algo muy importante, creo que me descuidé, dejé pasar los años, pero me quedó la experiencia... mientras siga jugando en Chiriquí haré todo para ganar", agregó este ariete, que reconoce que su carrera deportiva en ANAPROF pudo ser mejor.

Smith es padre de dos hijos: Aldair y Catalino, de 13 y 9 años, respectivamente. Es casado y comparte la mayor parte del tiempo con su esposa Luz Alina. Dice que uno de sus principales pasatiempos es comer; aunque también le fascina de la música tropical (salsa, bachata y merengue).

RETIRO
Catalino cuenta que quiere despedirse del fútbol de ANAPROF en el Torneo Clausura de este año y anhela salir campeón.

"Se lo comenté al profesor Valencia, nunca he salido campeón y si lo logro, sería lo mejor que me pasara en la vida", puntualizó.

De esta manera se fue El "Lobo" Smith al camerino, después de una ardua jornada, en la que fue el héroe de su equipo, al marcar el tanto que rescató un empate ante Plaza Amador y mantuvo a Chiriquí invicto con 4 puntos en dos jornadas del Torneo Apertura 2008 de ANAPROF.