Es que el intérprete de "Let's go crazy" tendrá que pagarle la suma de 2,95 millones de dólares a promotores irlandeses por haber cancelado un concierto a último momento en el 2008, dictaminó un juez el viernes en Dublín. ¡Qué tal!

Según se pudo conocer, la empresa MCD, la más grande organizadora de conciertos de Irlanda, dijo que le había pagado a Prince la mitad de su cuota de 3 millones de dólares por adelantado. ¡Tremendo billete!

Además, 950.000 dólares para arrendar el Croke Park para la noche del concierto, del que ya se habían vendido 55.000 entradas. ¡Mal, mal!

Entre otras cosas, el abogado de la compañía MCD, Maurice Collins, dijo que perseguiría al cantante Prince mediante las fuerzas europeas más poderosas si el artista no paga pronto.