Ella reside junto a su madre y dos de sus cinco hijos en la comunidad La Cordillera de Las Minas, provincia de Herrera.

La vida de Fany no ha sido fácil, ya que esta señora ha tenido que luchar para sacar a sus hijos adelante en medio de la pobreza y las dificultades de la vida.

TRISTE SITUACION
Los recursos económicos escasean en el hogar y es que Fany no tiene trabajo, por lo que se dedica al hogar. Contó que el padre de sus hijos es muy humilde también, y explicó que él sólo a veces la puede ayudar económicamente. Hay veces que no tienen para comer, sólo los niños se ayudan con los alimentos que les dan en la escuela.

APORTAN AL HOGAR
Los hijos más grandes están en internados, donde trabajan y estudian. Otra de las hijas trabaja en casa de familia y es quien ayuda un poco más con los gastos del hogar, mientras que uno de los más pequeños está en kínder en la escuela Los Helechales, que queda a 45 minutos de la casa y donde tiene que ir caminando. La más pequeña, de tres años, aún no está en la escuela.

GRANDES SACRIFICIOS
Todos los días, Fany se levanta a las 5:30 a.m. para caminar media hora a una quebrada a buscar el agua que transporta en la cabeza, pues en la comunidad el vital líquido no se ve, y el motor del acueducto no funciona.

A pesar de esto, Fany sigue adelante con sus hijos, inculcándoles buenos valores e incentivándolos a que sigan en la escuela para que el día de mañana no pasen los páramos por los que ella está pasando.

AYUDA
Los pies descalzos ya no sienten las piedras del camino, pero zapatos, ropa y comida serían una bendición para esta familia.