Raúl Hawkins, conocido por sus amigos como "Mambrú", se dirigía a su casa de vuelta del trabajo (un minisúper donde laboraba con unos asiáticos) utilizando un atajo, pero fue seguido por quienes lo mataron.

El sujeto que lo asesinó esperó que se internara en un camino oscuro, donde se construye una casa que está rodeada de mucho herbazal que ha crecido. Algunas personas dijeron que escucharon los tiros, pero no se imaginaron un homicidio.

Los primeros en ver al joven fueron algunos jóvenes que lamentaron el hecho y que recordaron que hace años asesinaron de ese mismo minisúper a un joven llamado Miguel. Raúl vestía un pantalón jeans corto, una camisa rojo vino y zapatillas, y permanecía con un ojo abierto.