No voy a escribir aquí cuál es mejor que el otro porque sería injusto. Ambos conceptos son abismalmente diferentes y hay que reconocerles la inversión en equipo técnico y de producción. Uno es pregrabado y el otro en directo. Uno es de baile con trabajo en equipo y el otro de dinámicas de intelectualidad, mezclado con habilidades físicas. ¡Ojo!, uno será más popular y generará más opinión pública porque implica música y baile. El otro tendrá un target más exclusivo, pero no por ello inferior.

En el caso de Súper Colegiales no puedo negar lo buena que está su producción. Tenía tiempo que en pantalla no se veía un diseño visual tan fino como los que tienen. Ese show tiene 'cerebro' invertido porque recrear una buena copia de algo tan reciente como 'Mega Match' no es fácil. Sus colores, las dinámicas, la escenografía, todo se nota que estuvo pensando y planificado. ¿Tiende a ponerse aburrido? Sí, se pone aburrido porque sus presentadoras caen en lo aburrido. Porque cuando tienen que brincar de la alegría y contagiarnos parecen que están en una procesión de Viernes Santo. Porque hay abuso de sonido ambiente de la barra insertado y se ve falso. Hay abuso de "protagonismo" de las presentadoras y dejan a un lado a los reales protagonistas y, para no ayudarlos, su propio canal creó una expectativa negativa de problemas internos que indudablemente afecta una producción porque la gente espera ver qué pasa 'entre ellas', en vez de centrar la atención en los equipos. Es un programa educativo: sí. Es un programa que puede verse en familia: sí. Es un programa que aporta: sí. Ojalá que por buscar más audiencia no se les ocurra inventarse turbas intercolegiales porque lo dañarían por completo.

Muévelo tuvo una promoción de lujo, maravillosa. Es una mezcla de Vive la Música con Canta Conmigo, pero versión bailable. La identidad de este show es nula porque, aunque éste es de baile, 'huele' a los otros. Su escenografía es bastante parecida, su locución es la misma que la de los otros shows y su presentador principal es un 'batido' de Rolando Sterling y Miguel Oyola. Sus jurados son, a mi parecer, decepcionantes, porque los que desconocemos los términos de baile no comprendemos qué están diciendo a la hora de evaluar y nadie, en video, nos lo explica. A una de sus jurados se le salió no el 'cobre', sino el aluminio con un léxico que, aunque muchos lo justifiquen porque así hablan los jóvenes, no es el ejemplo-mensaje que deben enviar y menos en un show de estudiantes. Los protagonistas tienen que ser los bailarines y no los jurados. ¡Ya basta de ese patético show del jurado temido, el conciliador y el romántico! Es un programa educativo: no, porque ni siquiera le están enseñando a la audiencia qué significa cada observación que hacen los jurados. Es un programa que puede verse en familia: sí. Es una buena producción: sí, con deficiencias en los tiros de cámara, pero con un esfuerzo técnico y de producción de aplauso.

Es injusto decir que uno le gana al otro porque ninguno compite ni en concepto ni en horario. Yo los hubiese programado, los dos, para domingos a las 7:00 de la noche para que la competencia 'horaria' sea justa y medir de verdad a cuál prefiere la audiencia. ¿Se atreverán? Sé que me responderán un 'Mega no'.

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