La que por poco inunda el país en llanto fue Leticia Adames Haaaasssan, luego de leer la nota que le hicimos de sus extensiones rara s. Dice que la chica no paraba de llorar, es más, corrió hacia el salón de belleza a arreglárselas, y eso que eran nuevecitas. ¡Ya sabes, a comprar extensiones caras y buenas!