Luis Escobar no sabe dónde esconder la cabeza. El refuerzo internacional del Tauro FC, y considerado entre los 10 mejores extranjeros de Centroamérica parece compartir la misma suerte de su equipo. Nada de goles.
Un maleficio que parece derretirlo como cera. Ya tiene 360 minutos que no encara el marco rival y las redes parecen jugarle una mala partida, en cada intento para anotar.
"El gol es una ocasión que llega -dice el delantero- cuando domina el balón y conversa, mientras el calor hace estragos sobre el Rommelín-. Hoy, frente al Alianza, superaremos todas las dificultades por las que ha atravesado el equipo y el gol caerá por sí solo".
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