Vuelven los abuelos a cerrar la 5 de Mayo. Desde ayer, 30 miembros de la Asociación de Jubilados Independientes cerraron la calle en demanda de la instalación de la Oficina de Control de Precios, que según el dirigente Eladio Fernandez, es un beneficio garantizado en la Constitución Nacional.
Pero el pliego de peticiones se extiende, ya que Fernández solicitó un aumento a los jubilados de 25 dólares para poder sobrevivir ante tantas alzas. Al cuestionarle sobre los 60 dólares de bono que le dio el Gobierno, enfatizó que "eso es una vez al año y que el hambre no es para un solo día".
Invitó a otros grupos a sumarse a la lucha y advirtió que no cesarán los cierres de calles hasta lograr su cometido.
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