Confía en Dios. "Si los doctores me dicen que juntas se salvan, prefiero que se queden unidas". Este es el sentir de una madre, quien pide a Dios todos los días para que sus pequeñas, las siamesas Shelsy Rachel y Evangeline Rachel, se salven.
De madre a madre, ánimos y pensamientos positivos era lo que sobresalía en la conversación que tuvo Kira Carles, madre de las siamesas chorreranas, y Sarita Gil, madre de las siamesas Yin y Yan, la primera de ellas fallecida tras la operación que las separó.
Ayer, Sarita Gil llegó hasta el Hospital del Niño para brindar su apoyo a Kira, quien tiene la esperanza de que sus niñas se salven.
Sarita le explicó a Kira lo importante que es transmitirles vibras positivas y "hablarles siempre" para que las niñas tengan fuerzas y salir adelante. Y es que Kira dijo estar consciente del diagnóstico de los doctores. También manifestó que si los médicos le dicen que juntas se salvan, ella prefiere no operarlas. No obstante, si es necesario intervenirlas, abogó por ayuda de las autoridades para poder sufragar los gastos, ya que según los médicos "son operaciones que se realizan afuera".
"Ellas me miran", contó Kira, quien a pesar de la condición crítica en la que están las gemelas unidas, nacidas el sábado, goza cada movimiento, mimo y momento que pueda.
Su padre, el joven Hernán Fuentes, fue el que escogió el nombre de Evangeline y su pareja Shelsy, ya que "ese nombre me gusta desde los quince años", expresó Kira.
Las pequeñas Evangeline y Shelsy comparten el corazón, el páncreas y el hígado por lo q ue los doctores dijeron que hay que esperar una evolución de tres a seis meses para considerar una operación que las separe.
|