Lindsay Lohan está de nuevo en el ojo de la tormenta. Miren si la cosa es fuerte que la policía ha pedido a un juez de la Corte de Los Ángeles que ordene el registro de la casa que Lohan tiene en Venice Beach después de haber sido fotografiada llevando un collar de gama alta (collar que pasa de mil dólares) que había desaparecido. ¡Chúpale!

Además de las fotografías, hay un video en el que la actriz de 24 años aparece llevando el collar, por ello ha sido acusada de robo. Si la tasación de la joya superara los 5.000 dólares, la joven podría ser acusada otra vez de cometer un delito.

A principios de enero, Lindsay acababa de ser puesta en libertad de la orden judicial que la condenaba a tres meses de estancia en un centro de rehabilitación. Hoy por hoy, todavía se encuentra en libertad condicional por otra pena al conducir bajo los efectos del alcohol en 2007.

También es muy posible que tenga que hacer frente a otra acusación de un delito que se produjo durante su estancia en un centro de rehabilitación. Al parecer, se le inculpa por agresión a un trabajador del Centro Betty Ford el pasado 12 de diciembre.

Lindsay Lohan ha estado ya cinco veces en rehabilitación, y periódicamente se tiene que someter a test de drogas y alcohol hasta su próxima audiencia en los tribunales el 24 de febrero. ¡Madre mía!