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Madrid | EFE |
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Toma un respiro. Con las señas de identidad que le llevaron a lo más alto hace un par de años, el Barcelona consiguió ayer una victoria en Glasgow ante el Celtic (2-3), que le abre los cuartos de final de la Liga de Campeones. Los azulgrana ofrecieron su mejor versión. Samuel Eto'o fue el delantero del póquer de estrellas atacantes, aunque empezó en el banquillo. El primer gol del juego lo anotaron los escoceses en una indecisión defensiva, ni Puyol ni Márquez ni Iniesta acertaron a despejar una jugada de McGeady, centró Naylor y los escoceses se adelantaron en el marcador con gol de Jan Vennegoor. Barcelona reaccionó en el minuto 16 con un gol de Messi. Sin embargo, los escoceses volvieron a marcar por intermedio de Robson al minuto 38. Los azulgranas no desistieron y sólo tardaron diez minutos en conseguir el empate a través de Henry con un elegante toque al palo opuesto del arqueros Boruc. El buen fútbol del Barca fue premiado a 11 minutos del final tras una jugada de Eto'o concluida con una genialidad de Messi.
OBJETIVO
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