El propósito es garantizar el manejo adecuado de los alimentos y evitar la proliferación de enfermedades.

Francisco Navarro, director Regional de Salud, explicó que se trata de una alerta sanitaria previa a las fiestas del Carnaval.

Mencionó que las personas que venden alimentos deben cumplir con los requisitos sanitarios que establece la ley, por lo que es obligatorio portar carné de salud y de capacitación. Además, deben tener un buen manejo de los desechos y los alimentos deben estar guardados en la temperatura adecuada.