Ahora, cuando al irrespeto se le suma la discriminación, es irresponsable no opinar. No puedo pasar por alto la falta de respeto de uno de los seudo-paparazzi llamado Simón contra los señores Franklyn Robinson y Félix Tijerino al utilizar el artículo "la" para hablar de 'ellos'. No conozco a Robinson ni a Tijerino, por lo que nadie puede decir que los defiendo por eso. Ellos deberán defenderse solos del atrevimiento del seudo-paparazzi Simón que evidentemente no tiene conectado su cerebro con su lengua y mucho menos en su léxico existe la definición de respeto.

Aquí lo grave es que cuando en televisión nacional se irrespeta a una persona por sus preferencias sexuales, por su color de piel, por su religión o inclinación política, estamos ante una pública invitación a la discriminación y ante una falta total de respeto a la audiencia.

El seudo-paparazzi Simón, no tiene la más remota idea de que la libertad de expresión va de la mano de la responsabilidad y lo que ellos practican, reitero, disfrazado de periodismo del corazón, es irresponsabilidad televisiva. Simón no ha aprendido aún que hay una diferencia entre ser un presentador de televisión y un payaso de circo. No aprendió que si Franklyn Robinson es homosexual o no, eso no tiene que relacionarse con su trabajo en los medios. ¡Califíquenle su trabajo, no su sexualidad! No sabe el seudo-paparazzi que en el propio canal donde él labora existen varios homosexuales y que eso no los hace ni menos ni más profesionales y que, como tales, merecen igual respeto. Este jovencito no sabe que una lesbiana sigue siendo "ella" y que un homosexual sigue siendo "él". En otras palabras, este seudo paparazzi es tan irrespetuoso como su programa y lo peor, el canal se lo permite. Le permite esa falta de respeto. Le permite esa pública invitación a irrespetar a las personas por sus preferencias sexuales. Le permite la discriminación porque si usted recuerda, fue en este mismo espacio donde critiqué fuertemente a Parecen Noticias por racistas.

En estos tiempos en que lo irrespetuoso se está convirtiendo en normal y donde en pantalla sobra la inexperiencia de personajes que aterrizan en ella sin conocer, ni siquiera, la geografía de su país, no se puede permitir el irrespeto a una persona por sus preferencias ya sean sexuales, políticas o religiosas.

Así como el reguesero Pshyco tuvo que rectificar una de sus canciones donde mencionaban de manera irrespetuosa a Robinson y Tijerino, lo correcto, si es que le queda algo de eso a Simón, es ofrecer disculpas con la misma prominencia que los calificó como mujeres. Claro está, sé que Simón, por lo que demuestra en pantalla está bien lejos de ser respetuoso, y a años luces de ser un caballero.

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