El pasado sábado se decomisaron en aguas internacionales, a unas 113 millas náuticas, entre la frontera de Nicaragua y Honduras, cuatro toneladas de cocaína, acción que fue llevada a cabo por los guardacostas de los Estados Unidos, quienes dieron aviso a las autoridades panameñas. Los bultos de droga se encontraban en la embarcación comercial Ani I, con bandera panameña, en la que viajaban tres panameños. Esta mercancía fue bajada en Sherman y transportada de inmediato a la ciudad de Panamá.