Cuando en Panamá se escucha el apellido Corpas, en seguida, por un acto de reflejo, se piensa en el cerrador de los Rockies de Colorado, en las Grandes Ligas.
No obstante, no todos los que llevan ese apellido se inclinan por el béisbol. Hay quienes piensan en el baloncesto, como José Corpas, sobrino de Manuel, quien defiende los colores de la Escuela de Contabilidad y Comercio Gastón Faraudo P., en el Campeonato Intercolegial de Baloncesto organizado por el Club Kiwanis.
Por si hay dudas, José sí hizo sus pininos en el béisbol, pero el llamado del tabloncillo fue más fuerte que los genes.
SUEÑOS
El canastero tiene entre ceja y ceja destacar en el baloncesto, quiere jugar en Italia, pero sabe que para llegar allá tendrá que luchar, entrenar y sacrificarse. El aliciente de José es esa beca de la que hablaron antes de iniciar el torneo. Ya él sabe y disfruta de una y por eso estudia en el Gastón.
"Yo jugué béisbol, pero me ponchaba mucho", dijo el canastero, quien representó a Panamá en los Juegos CODICADER, en Guatemala.
"Sobre lo que dijeron en este torneo, que habrá becas para estudiar en Estados Unidos, mi meta es ir paso a paso", sostuvo.
José cierra los ojos y de aquí a un par de años se ve jugando en Italia, ese es el básket que le gusta, como también disfruta del juego de los panameños Michael Hicks, por su astucia a la hora de encestar, y la potencia que pone Jaime Lloreda en el centro.
Su residencia está en Curundú, un barrio con problemas sociales, pero Corpas no se distrae y mientras unos "birrean", él entrena y trata siempre de aprender algo nuevo.
"Yo quiero superarme, hacer las cosas mejor. Quiero tirar, pasar cortar, penetrar y hacer todo lo que un jugador de basketbol debe saber", concluyó.
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