"No se lo merecía". Estas fueron las primeras palabras de la señora Markesa Versae, al enterarse del estado de salud de su hijo Omar Ibarra, quien se suma a los siete menores de edad que llegaron al Hospital Santo Tomás (HST) con quemaduras, producto de un incendio en el Centro de Cumplimiento de Menores en Tocumen, ocurrido la mañana del domingo.
Markesa explicó que la última vez que vio a su hijo fue el viernes y él le comentó que tenía tres días sin bañarse y que no aguantaba más que los tuvieran como "animales".
Según la señora, a pesar de que su hijo cumplía una condena de prisión por cinco años debido a un robo, este había cambiado, pues estaba estudiando y, por su buen comportamiento, pronto le permitirían visitar cada quince días a su familia. Ahora él está delicado en el hospital.
HOSPITALIZADOS
Médicos de la Sala de Quemados del HST explicaron que los jóvenes tienen quemaduras de tercer grado en todo el cuerpo, cara y pecho, además de lesiones internas que los mantienen entubados y muy delicados de salud.
INVESTIGAN
Mientras que las familias de los afectados pidieron justicia, el Ministerio Público comenzó la investigación con los policías que estaban en el lugar, pues hasta el momento se tiene como prueba un video, donde se presume que un uniformado lanzaba una bomba lacrimógena a una de las celdas. Además, se observa a policías viendo cómo pedían auxilio los jóvenes mientras se quemaban.
DATOS
En el lugar hubo dos incendios, uno fuera de las celdas que fue sofocado y otro dentro. Este causó el incidente.
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