Los natariegos tiraron la casa por la ventana, y es que las bonanzas para este pueblo productor agrícola marca el paso. El viernes 20 de mayo -día de la celebración de su fundación- se inauguró la Plaza Mayor de Santiago Apóstol, patrono de los natariegos, que posee un aire barroco, que la identifica con los diseños hechos en Castilla de Oro.

La fiesta siguió hasta este pasado domingo, cuando en horas de la tarde dio inicio al tan esperado "Paseo de carretas" por las principales calles de la ciudad. La concurrencia superó la de otros años, la Avenida Central -recién pavimentada- se quedó corta para que propios y extraños quedaran contagiados de la festividad.

Unas veinte carretas decoradas con motivos folclóricos, donde se expresaban aquellas narraciones de los abuelos de cómo era Natá a principios de siglo, fue del agrado de todos los presentes. Tres carretas fueron ganadoras de premios en efectivos.