Blanca Moreno, subsecretaria de la Asociación de Padres de Familia, señaló que no descartan acciones drásticas, como el cierre de calles, para exigir ayuda.

Manifestó que en varias ocasiones han sorprendido a los amigos de lo ajeno robando, y el temor de todos es que le hagan daño a un niño o maestro.

"A veces encontramos carrizos de droga. Tenemos miedo que los maleantes hurten las computadoras", dijo.

En tanto, Marian Romero, una de las maestras, dijo que todos los educadores se han unido en esta lucha y no descansarán hasta que el MEDUCA construya la cerca y nombre al vigilante.