Debido a los trabajos que se realizan en el sector, los lugareños han presentado dificultades como rajaduras en las paredes de sus casas, temor de ser sepultados por los deslizamientos de tierra, que se incrementa cada vez que llueve. Además, la antena que tienen cerca, debido a las excavaciones, en cualquier momento pude colapsar.

INCOMODIDADES
Blasina Bethancourt, vocera de Nuevo Amanecer, expresó que la barriada ha sido destruida y, para llegar a sus residencias, tienen que pasar por donde un día existió una vereda pero que, actualmente, se efectúan los trabajos de construcción del corredor. Dijo que han tenido que improvisar caminos y, cuando llueve, les es difícil pasar por el lugar.

Además, cuando realizan demoliciones de las viviendas, los trabajadores de PYCSA, responsable del Corredor Norte, no desechan el caliche, las letrinas no son tapadas y el monte lo dejan crecer, lo que representa un peligro .

El mayor deseo de los moradores es que se les dé respuesta a sus inquietudes, puesto que es su vida la que está en juego.

DICEN ALGO
Un vocero de la empresa PYCSA, que prefirió la reserva de su nombre, las indemnizaciones se realizan mediante un proceso y estudio de la situación de vivienda de cada familia. Además, es deber de los trabajadores botar todo el caliche de las viviendas que son demolidas.

"En diversas ocasiones, los moradores se han reunido con los encargados del proyecto, pero nunca llegan a un acuerdo", agregó Blasina.

ESFUERZOS
Para los lugareños, es difícil tener que mudarse, pues sus viviendas las han construido con mucho esfuerzo.