Una de las personas que ha visto todo el crecimiento musical y que ha estado presente desde que nació Margarita, es su abuelita paterna del mismo nombre, quien también es cantante. Ella es el motor familiar, es esa que da fuerza, ánimo y ganas de salir adelante, así lo pudimos ver cuando pasamos un rato con ella. Serena y sin ninguna seña de nerviosismo, la vimos a escasas horas del veredicto de Latin American Idol. "No estoy nerviosa porque confío en Margarita, además, el talento ya está y sólo hay que esperar el apoyo del pueblo panameño, que hizo mucho", comentó la orgullosa abuela.
A diferencia de muchos de sus familiares, la señora, que está "pechona" por su nieta, no ha llorado durante ninguna de las presentaciones. Sin embargo, sí ha derramado algunas lágrimas al recordar a su nieta de pequeña, sus remembranzas y locura la hacen reír y llorar. "Hace como cuatro días recordé cuando ella era pequeña, íbamos a cantar con Juancín. Usaba unos zapatones y yo me decía, ¡ay mi niña, qué futuro muy duro le espera!", haciendo referencia a su carrera como artista.
La abuela Margarita, a diferencia de los demás, que disfrutan de todas las presentaciones del afamado concurso, prefiere verlo sola, ya que así puede escuchar mejor y sin interrupciones.
No pudimos dejar de preguntarle si está preparada a no verla más a menudo, por si gana. Muy segura, nos dijo que sí. "La vamos a extrañar, pero ese es el camino que ella eligió y hay que respetarlo".
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