"Yo le estoy pidiendo a Dios que me dé paciencia y la tranquilad, pero esos son mis niños y yo los quiero ver". Estas fueron las palabras de desesperación de Mitzila Chávez, madre de los seis niños sacados de las condiciones de pobreza en que vivían en Las Garzas de Pacora.
Mitzila salía a trabajar para poder mantener a sus vástagos, que ahora están en un albergue del Ministerio de Desarrollo Social, donde informaron que la dirección de arquitectura hace los trámites para acondicionar la vivienda en la que reside Mitzila con su hermana y el esposo de ésta.
Además, el MIDES otorgará un subsidio a la fundación Pro Vida para que la señora pueda laborar, estudiar y estar con los niños.
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