En una verdadera locura, se ha convertido la inscripción de los aspirantes al cargo de Defensor del Pueblo. ¿La razón? No hay quién no quiera ostentar tan digno cargo, pues hasta la fecha han sido más de 55 los candidatos que anhelan defender al más desvalido. Según informes de la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Nacional, este año el llamado ha sido masivo, ya que no esperaban que tantas personas se sintieran atraídas, porque reconocen que ser Defensor del Pueblo es un cargo bastante difícil y de gran responsabilidad; pero, favorablemente, han comprobado que existen muchas personas que llenan los requisitos necesarios para participar.
Hoy cerrará el periodo de inscripción de aspirantes, para que a más tardar, en enero próximo, se remita al pleno de la Asamblea Nacional y por votación unánime sea escogido el nuevo paladín de los panameños, que entre tantos deberes, tendrá que velar por los derechos e intereses de los reclusos de las cárceles, personas con enfermedades terminales, discapacitados y trabajadores para que no se les violen sus derechos, ya que según las estadísticas, son estas personas las que más acuden a la institución.
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