Johan nació el 16 de noviembre y el único contacto que tienen sus padres es por medio de una ventanita, por donde pueden tocar sus dedos. (Foto: Carolina Sánchez P. / EPASA)
Carolina Sánchez P.
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"El destino nos lo arrancó de nuestro hogar", dijeron Joel y Joana, al referirse al estado de salud de su hijo Johan Joel, quien tiene 25 días de nacido y permanece recluido en el Complejo Hospitalario Arnulfo Arias Madrid, luchando por su vida.
Joana contó que su hijo nació bien y al pasar los días, los latidos del corazón eran más rápidos hasta el punto que tuvo dificultad para respirar.
"Cuando lo llevé al médico, jamás pensé oír que tenía malformaciones y que su vida podía terminar en cualquier momento", dijo la joven madre.
La dificultad de los padres de Johan consiste en que no cuentan con el dinero para viajar y pagar la operación que sólo se practica en el extranjero.
Joana es enfermera y tuvo que renunciar a ofrecimientos de trabajo para poder cuidar a su bebé, pero no pierde las esperanzas en conseguir la ayuda que necesita en alguna organización que se solidarice con su causa.
Explicó que el corazoncito de su bebé, que está en una incubadora, no creció, pues sufre una malformación congénita.
Joana está llena de optimismo, se ha armado de valor por la vida de su bebé e intenta recaudar dinero para llevarlo a otro país para que lo operen. "Lo único que me han dicho los galenos es que la cirugía no la hacen aquí y que es muy costosa", afirmó.
Mientras, la familia realiza rifas para recoger los fondos. Las personas interesadas pueden llamar al número 292-4501.
LUCHADOR
Una mínima parte del corazón de Johan está funcionando y se puede detener en cualquier momento.
