En el camino, Kadir fue encañonado y despojado de los B/. 35.00 que se había hecho en la noche. Luego de ser agredido con la cacha del arma en la ceja, lo bajaron del carro y huyeron en él. Un colega taxista que iba pasando, lo ayudó y lo llevó donde el dueño del vehículo.

A través de un operativo, la Policía de Santa Marta ubicó el vehículo abandonado y a uno de los asaltantes. El dinero no ha aparecido, pero Kadir agradece estar con vida.