Jóvenes que trabajaban hace dos meses en una barbería, en Viejo Veranillo, cerraron la vía que conduce hacia el centro de la capital frente a la Universidad de Panamá. Ernesto Lenys, dueño de la barbería "La Elegancia", explicó que ellos fueron removidos del local que tenían establecido dentro del barrio, debido a que la vereda que se construye desde la parada hasta dentro de Viejo Veranillo, pasaba por su negocio.

Le pidieron que desalojaran, fueron removidos a una esquina en la entrada de la calle, pero luego le dijeron que no se podía.

"El señor Gabriel Méndez, asesor de la Alcaldía, me reubica allí debajo del puente peatonal", dijo Lenys.

Pero ayer en la mañana, la corregidora acudió a decirle que no podían construir. "Me tiraron gas y los guardias sacaron pistolas y todo", sustentó. Por esta razón, ellos cerraron la calle. Mientras tanto, el representante de Curundú, Senén Mosquera, apoyaba a los muchachos, al tiempo que sostuvo una acalorada conversación por celular con el alcalde, Juan Carlos Navarro.

La Alcaldía de Panamá ordenó suspender la construcción de la barbería, pues ocupa servidumbre pública y no cuenta con los permisos.

SIN LUGAR FIJO
En esta barbería trabajan 5 jóvenes, unos deben mantener a sus hijos; otros, pagar sus estudios.

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