Así como leen, Madonna y Ritchie acudían al estreno de la película "Revolver", dirigida por éste, pero atravesaron el público sin firmar autógrafos y sólo posaron brevemente para unas fotos. El astro del filme, Jason Statham, pasó casi una hora firmando autógrafos y éstos chifearon el asunto.

La diva del pop afirmó que el astro de la noche era su esposo, y que ella disfrutaba de no ser el centro de atención en la alfombra roja. "Para mí es pura diversión. Sólo tengo que vestirme bien y mostrarme", dijo, pero a nadie hizo reír. ¿Qué pasa Madonna?

¡Ah!, les cuento que la crítica pulverizó a "Revolver", pero Ritchie defendió su obra. "Los críticos han sido duros conmigo durante toda mi carrera, pero no me afecta. Acepto las reglas del juego", dijo el director de la muy exitosa Lock, Stock and Two Smoking Barrels (1998) y Snatch.